lunes, 31 de mayo de 2010

Prosa del Transiberiano

Monolito señalando el km 9288, en el extremo del Transiberiano localizado en Vladivostok. Fuente:wikimedia

Murmullos de mujeres
Y el silbido del vapor
Y el eterno ruido de las ruedas locas en los carriles celestes
Los vidrios están escarchados
¡La naturaleza no existe!
Y detrás, las llanuras siberianas el cielo bajo y las grandes sombras de los
Taciturnos que suben y bajan
Estoy acostado sobre una manta de viaje
Colorinche
Como mi vida
Y mi vida no me abriga más que esa manta
Escocesa
Y toda Europa entrevista por el parabrisas de un expreso a toda máquina.

Prosa del Transiberiano y de la pequeña Jeanne de Francia
Blaise Cendrars

1 comentario:

Ar Lor dijo...

El Transiberiano junto con el viaje a Petra, recordad todos, que está pendiente. Conocer gentes, lugares, comer, beber, leer, escribir... ¿falta acaso algo, en esta lista?