jueves, 14 de octubre de 2010

¡Contacto!

Ronau Woiceske. El viejo sicomoro.

Piensa en tu vida en plena naturaleza: algo que contemplas a diario, con lo que te hallas en contacto... ¡Rocas, árboles, el viento en tus mejillas! ¡La sólida tierra! ¡El mundo real! ¡El sentido común! ¡Contacto! ¡Contacto!

Los bosques del Maine, 1864
Henry David Thoreau

4 comentarios:

Carmen López dijo...

Hemos perdido el contacto con la Naturaleza y entre nos, creo que nunca hemos sabido tocarnos y sin contacto no podemos ni sertirnos ni conocernos, mucho menos amarnos. Habría superar ese miedo o ese pudor a tocarnos.

RITMO RANCIO dijo...

Magnífico blog y magníficas entradas
Un placer pasear por aquí

Saludos musicales desde el sureste de España.

Higinio dijo...

Muchas gracias por tu amable comentario sobre el blog, amigo RITMO RANCIO.

Y que siga la música.

Un abrazo.

Higinio dijo...

Rubrico tu comentario, amiga El Patio.
El contacto con la Naturaleza es recuperable. En realidad, hay muchísimas personas que de una manera u otra no han perdido ese contacto.

El otro es casi un imposible. La culpa la tiene la religión, que entre Grandes Verdades (amaos los unos a los otros), nos ha fijado, por contra, en el alma, que "tocar es pecado".

Un fuerte abrazo, amiga El Patio.