El hombre, lo quiera o no, tiene dos vidas. Una que se ve y otra que no se ve. La primera le permite vivir de acuerdo con la sociedad; la segunda vivir de acuerdo consigo mismo. Y por ambas será condenado el Día del Juicio. Porque en ambas ha pecado. Contra sí mismo y contra sus semejantes.
Traducción de Eloísa Alvarez
Diario (1932-1987)
Miguel Torga
No hay comentarios:
Publicar un comentario