jueves, 1 de septiembre de 2016

Uno y el universo

Ernesto Sabato. Uno y el universo.

Fantástico
Es la palabra con que designamos lo insólito. Por eso se aplica continuamente en los viajes y en la historia del pensamiento. No es que designe cosas de contenido mágico: simplemente designa otras cosas.

Hombre y mujer
Habrá siempre un hombre tal que, aunque su casa se derrumbe, estará preocupado por el Universo. Habrá siempre una mujer tal que, aunque el Universo se derrumbe, estará preocupada por su casa.

Oficio
El oficio -en el arte- consiste en que no se lo advierta.

Poderío del lenguaje
La riqueza del lenguaje puede ser medida por el número de las palabras, pero no su poderío. Hay escritores que se arreglan con un vocabulario restringido, que sacan matices y partido del que tienen por la maestría en la colocación. Como en el ajedrez, una palabra no vale por sí sola sino por su posición relativa, por la estructura total de que forma parte. Sólo un escritor mediocre puede desdeñar ciertas palabras, como un mal jugador de ajedrez desdeña un peón: no sabe que a veces sostiene una posición.

Uno y el universo (1945)
Ernesto Sabato

2 comentarios:

Francesc Cornadó dijo...

Clarísimo y riguroso Sabato. "Uno y el universo" es una auténtica delicia.
Saludos

Higinio dijo...

Libro exquisito. Para paladares antiguos.

Un fuerte abrazo, amigo Francesc Cornadó