martes, 15 de enero de 2008

La vieja lavadora

Había una vieja lavadora al borde de la carretera, y paró un poco más adelante para echar un vistazo. Mientras caminaba por el arcén pasó echando leches una camioneta destartalada y sus ocupantes le gritaron algo. No pudo oír lo que decían, pero le dio tiempo a ver las muecas de las carcajadas en sus caras de adolescentes.
La lavadora era un trasto viejo, con ronchones de óxido por todas partes, pero eso no quería decir nada. Abrió el ojo de buey y se alegró al ver que no se había equivocado; el tambor estaba reluciente como el primer día. Le servía, así que regresó a la furgoneta a por la caja de herramientas. Destripó la lavadora y extrajo el tambor; le llevó algo más de una hora. En ningún momento se le ocurrió preguntarse qué hacía la lavadora allí, junto a la carretera. Metió la caja de herramientas y el tambor en la furgoneta y arrancó.
El día empezaba bien, sí, y estaba de buen humor.
"La vieja lavadora"
Asdrúbal Hernández

2 comentarios:

Ar Lor dijo...

Este texto, no lo conozco yo

Gavilán dijo...

Lógico: es del libro que estoy escribiendo.