domingo, 10 de febrero de 2008

Sizigias y cuadraturas lunares

Ilustración Emerson Ward. Fuente:www.elfwood.com

Sizigias y cuadraturas lunares ajustadas al meridiano de Mérida de Yucatán por un anctítona o habitador de la Luna, y dirigidas al Bachiller Don Ambrosio de Echeverría, entonador que ha sido de kyries funerales en la parroquia del Jesús de dicha Ciudad, y al presente profesor de logarítmica en el pueblo de Mama de la Península de Yucatán, para el año del Señor de 1775.

Estando para disolverse el Congreso, a que yo asistí como secretario y computista, vimos como a distancia de dos millas y media (¡quien lo pensara!) un carro o bajel volante, instruido de dos alas y un timón, puesto donde debe estar, que venía rompiendo nuestra atmósfera con una celeridad increíble. Al principio pensamos que todo era ilusión, pues no hay memoria ni tradición de haberse visto jamás en nuestro orbe hombre alguno en cuerpo y alma. Salimos a conducirle a nuestro Ateneo y, después de haber hecho el arráez una profunda reverencia, dio cuenta muy por menor de su viaje y destino del que nosotros sólo podremos hacer un extracto muy diminuto, y él, allá de vuelta, podrá explayarse cuanto pueda y quiera.
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..que en todo el Universo no puede darse lugar más cómodo, más ameno, ni más delicioso para habitación de vivientes que adoren y alaben al Criador. Yo apuesto que si hubiera discurrido por todas estas regiones cualquiera de los que condenan como absurda la opinión de colocar en la Luna el Paraíso de donde fue empujado el buen padre Adán, por dar gusto a una mujer (¡ojalá no se hubiera derribado a su posteridad esta fácil condescendencia!), acaso moderara su sentir. ¡Qué maravillas y bellezas de naturaleza, que aquí pasan por ordinarias y no pueden contemplarse sin estupor y asombro! ¡Qué gobierno tan dulce y acomodado a la temperie de los antíctonas! Ciertamente, allá nuestro globo terráqueo, por su constitución, ha menester distinción de clases, en donde la suerte de los que gobiernan es la más infeliz; porque si el superior gobierna mal, a todos desagrada, si gobierna bien, a pocos podrá agradar, siendo muy pocos los amantes de la justicia y equidad.

3 comentarios:

Ar Lor dijo...

El título es acojonante ¿verdad?

Ar Lor dijo...

No se si me he explicado bien, me refiero al título completo,¡escribían casi el libro en la portada!

Higinio dijo...

Hay otro título que corre por ahí y que es más o menos así:

" De la influencia de las colas de pescado en las ondulaciones del mar"
El autor, cuyo nombre no recuerdo, demuestra con contundencia que son las colas de los peces en su agitación lo que provoca las mareas.