Esta muchacha que parece
liberada señorita de compañía
cena sola
acepta mi mirada distrae
un gesto hacia el oeste
mientras descansa
el rabillo del ojo en mi deseo
no es Rebeca ni ha dejado
a su tirana dueña
en un sopor de vieja millonaria impertinente
simplemente espera a un marido lento
joven bello alto displicente
que al fin llega
y ni siquiera me concede la cortesía de la sospecha.
"Pero el viajero que huye"
Manuel Vázquez Montalbán
1 comentario:
A toda/os los solitaria/os.
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