miércoles, 18 de marzo de 2020

Teatro

Ilustración de Radoslaw Kazmierczak.

Me levanté muy temprano. Salí del hotel y comencé a deambular por el Puente, porque siempre me ha gustado conocer las ciudades cuando nadie las recorre. Cuando parece que se dejan sorprender, y yo diría que hasta les gusta.
Y he vuelto a encontrarme con las calles enmudecidas, con el viento que pasa muy suave y con esa luz de las farolas que al fundirse con la claridad del amanecer teje una penumbra en la que me gustaría vivir. Ese escenario donde, a lo lejos, suele verse pasar a un hombre. Como aquel que vi en una plaza pequeña donde había un teatro. Un hombre que se perdió en una esquina como quien se pierde para siempre. Y esa pérdida tal vez es una cortesía que alguien nos hace.

Cuentos de amor y del Norte (2005)
César Gavela

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