A Naturalist's Voyage Round the WorldChapter XVIIITahitiNovember 15th.—At daylight, Tahiti, an island which must for ever remain classical to the voyager in the South Sea, was in view. At a distance the appearance was not attractive. The luxuriant vegetation of the lower part could not yet be seen, and as the clouds rolled past, the wildest and most precipitous peaks showed themselves towards the centre of the island. As soon as we anchored in Matavai Bay, we were surrounded by canoes. This was our Sunday, but the Monday of Tahiti: if the case had been reversed, we should not have received a single visit; for the injunction not to launch a canoe on the Sabbath is rigidly obeyed. After dinner we landed to enjoy all the delights produced by the first impressions of a new country, and that country the charming Tahiti. A crowd of men, women, and children, was collected on the memorable Point Venus, ready to receive us with laughing, merry faces. They marshalled us towards the house of Mr. Wilson, the missionary of the district, who met us on the road, and gave us a very friendly reception. After sitting a short time in his house, we separated to walk about, but returned there in the evening.Viaje de un naturalista alrededor del mundoCapítulo XVIIITahití15 de noviembre. Al rayar el día llegamos a la vista de Tahití, isla clásica para todos los viajeros del mar del sur. Vista a cierta distancia es poco atractiva: no se distingue todavía la admirable vegetación de las tierras bajas y casi no se ven, entre el celaje, más que los picos abruptos y los precipicios que forman el centro de la isla. Gran número de canoas vienen a rodear nuestro barco tan pronto como echamos el ancla en la bahía de Maravai; para nosotros es domingo, para Tahití es lunes, pues de otro modo no hubiésemos recibido ni una sola visita; porque los habitantes obedecen con exactitud la orden de no echar al mar una canoa en domingo. Después de almorzar desembarcamos para disfrutar de todas las deliciosas impresiones que produce siempre un país nuevo, y sobre todo cuando ese país es la encantadora Tahití. Una porción de hombres, de mujeres y niños, todos alegres y divertidos, se reúnen en la célebre punta Venus para recibirnos, y nos llevan a casa de Mister Wilson, misionero del distrito, que nos acoge con la mayor cordialidad. Después de descansar allí unos momentos vamos a dar un paseo.
Viaje de un naturalista alrededor del mundo
(Traducción Manuel Vílchez de Serradel,1906)
Charles Darwin
1 comentario:
La pintura corresponde al
Resolution y al Adventure en Matavai Bay (Tahití), de William Hodges (año 1776)´son los barcos del segundo viaje de exploracion del Pacífico de James Cook.
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