ProsodiaEl hombre que me vendió el mapa no tenía nada de extraño. Un tipo común y corriente, un poco enfermo tal vez. Me abordó sencillamente, como esos vendedores que nos salen al paso en la calle. Pidió muy poco dinero por su mapa: quería deshacerse de él a toda costa. Cuando me ofreció una demostración acepté curioso porque era domingo y no tenía qué hacer. Fuimos a un sitio cercano para buscar el triste objeto que tal vez él mismo habría tirado allí, seguro de que nadie iba a recogerlo: una peineta de celuloide, color de rosa, llena de menudas piedrecillas. La guardo todavía entre docenas de baratijas semejantes y le tengo especial cariño porque fue el primer eslabón de la cadena. Lamento que no le acompañen las cosas vendidas y las monedas gastadas. Desde entonces vivo de los hallazgos deparados por el mapa. Vida bastante miserable, es cierto, pero que me ha librado para siempre de toda preocupación. Y a veces, de tiempo en tiempo, aparece en el mapa alguna mujer perdida que se aviene misteriosamente a mis modestos recurso.
Juan José Arreola
5 comentarios:
Gracias a esta entrada de Juan José Arreola he vuelto a releer algunos de sus escritos.Recuerdo haberlo leido allá en mi juventud y disfrutar con su lectura,especialmente un relato titulado "Para entrar al jardin" de Palindroma.No se nada acerca de si Arreola era o no misógeno,pero el relato no creo que sea del gusto femenimo o feminista (que más da estos términos hoy en día).
Para seguir con el placer de leer a Arreola,escribo aquí un pequeño relato del libro Prosodia:
"A principios de nuestra Era,las llaves de San Pedro se perdieron en los suburbios del Imperio Romano.Se suplica a la persona que las encuentre,tenga la bondad de devolverlas inmediatamente al Papa reinante,ya que desde hace más de quince siglos las puertas del Reino de los Cielos no han podido ser forzadas con ganzúas."
Arreola está considerado como uno de los precursores del microrrelato en español.
Sirva este ejemplo:
Cuento De Horror
La mujer que amé se ha convertido en fantasma.Yo soy el lugar de las apariciones.
no he leido nada de Arreola, pero por los jugosos comentarios, tendré que echarle un vistazo.
Este fin de semana compré un libro de Enrique Olmos llamado La voz oval. El libro contiene 6 obras de teatro breves, me llamó la atención una en especial: "Gonzalo y el mapa de los objetos perdidos". Esta obra está basada en el cuento de Arreola, el cual desconocía hasta el día de hoy. Efectivamente, tal como narra Arreola, es la historia de un vendedor común y corriente que le vende un mapa "maravilloso" a un peatón (incrédulo, al principio)Cuando el mapa es puesto a prueba, los futuros dueños (porque así lo plantea la obra) se llenan de esperanzas, pero al igual que en el cuento de Arreola, algo termina agotándolos, desanimándolos y para recuperar la esperanza que perdieron junto con la compra del mapa recurren al mismo truco del cual fueron víctimas. No es la primera vez que el escritor de Zapotlán el Grande, hoy ciudad Guzmán "incursiona" como vendedor en sus cuentos, a parte del Mapa de los objetos perdido tenemos La plasti Sex, Baby HP, La parábola del trueque por citar algunos, cuyos productos como cualquiera que se venda en televisión, cine o periódico, traen la decepción para sus compradores. Tanto el cuento de Arreola como la obra de Olmos, juegan con las ilusiones de los seres humanos, quienes desean, anhelan y sueñan con la fortuna sin hacer un mínimo esfuerzo por alcanzarla.
Bienvenido Shaka. Magnífico comentario social y literario. Es un placer leerlo. Esperaremos ansiosos tus próximos comentarios. Nos agrada que te guste nuestra bitácora.
Muchos saludos.
Publicar un comentario