"Una mañana de diciembre, su padre lo llevó andando al pie de los Alpes japoneses, en el centro de Honshu, le señaló un cima, allí donde moran las nieves perpetuas, le entregó unas alforjas llenas de víveres y un pergamino de seda, y le dijo:- No vuelvas hasta que lo sepas.Sacerdote o guerrero. Elige tú.El adolescente escaló la montaña a despecho del peligro y la fatiga. En la cima, halló un refugio bajo la roca y se sentó allí frente al esplandor del mundo.Siete días permaneció alimentandose de la belleza en las puertas del cielo. En el pergamino de seda, no escribió más que una sola palabra, una palabra de esplendorosa blancura.Cuando regresó junto a su padre, éste le preguntó:-Yuko, ¿has encontrado tu camino?El joven se hincó de rodillas y dijo:- Mejor aún, padre. He encontrado la nieve."
Maxence Fermine
Nieve
1 comentario:
Maravilloso texto, Ulises.
¿La foto es tuya?
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