domingo, 14 de diciembre de 2008

El ciprés de Silos

El ciprés del Monasterio de Silos
Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas al cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño.

Mástil de soledad, prodigio isleño;
flecha de fe, saeta de esperanza.
Hoy llegó a ti, riberas del Arlanza,
peregrina al azar, mi alma sin dueño.

Cuando te vi, señero, dulce, firme,
qué ansiedades sentí de diluirme
y ascender como tú, vuelto en cristales,

como tú, negra torre de arduos filos,
ejemplo de delirios verticales,
mudo ciprés en el fervor de Silos.

El ciprés de Silos
Gerardo Diego

1 comentario:

Ar Lor dijo...

Maravilloso ciprés y maravilloso Silos. Es uno de los lugares que con banda ancha y correos trayéndote las novedades literarias, ofrece todo el glamour para escribir, algo semejante a una cápsula del tiempo para la imaginación.